Por Mili Olivari

En horas de la mañana del martes, un grupo de empleados municipales pertenecientes al fondo de ayuda municipal (FAM) rompieron los vidrios y ventanas del frente de la Municipalidad con motivo del despido de dos empleados.

La semana pasada un grupo de empleados municipales se presentaron frente al Palacio Municipal pidiendo poder hablar con alguna autoridad sobre su sueldo. Expresaron que estaban trabajando en negro y cobrando $1030 la hora. Luego de horas de manifestarse allí, les ofrecieron $270 de aumento, pudiendo cobrar así un total de $1300 por hora. Ese día, los empleados decidieron no aceptar la propuesta y dar a conocer los hechos en los medios de comunicación.

Hoy por la mañana se encontraron con la noticia de que dos trabajadores habían sido despedidos por dichos actos, por lo que sus compañeros decidieron hacerse presentes nuevamente frente al municipio, pero esta vez de forma no pacífica. Rompieron vidrios y ventanales del ingreso principal a la municipalidad, y cortaron el tránsito por unos minutos.

Desde la Municipalidad lanzaron un comunicado donde detallaban:

“En horas de la mañana, un grupo de aproximadamente 12 trabajadores están incluidos en el fondo de ayuda municipal (FAM) agredieron las instalaciones municipales, rompiendo los vidrios y ventanas del ingreso, y atacando con piedras el frente de la Municipalidad.

Poniendo en riesgo la integridad tanto de los empleados municipales como la de los vecinos que se encontraban dentro de la dependencia realizando diferentes trámites administrativos, estos últimos tuvieron que resguardarse para evitar ser alcanzados por las piedras arrojadas por los manifestantes.

Es importante destacar que, desde hace unos días, este grupo de personas, quienes habían estado reclamando aumentos, recibió un aumento de más 25% por parte del ejecutivo. Sin embargo, considerando esto como insuficiente, el reclamo continuó esta mañana.

Desde el Municipio, respetamos el reclamo salarial, pero repudiamos enfáticamente estos actos violentos que ponen en riesgo la integridad del resto de los empleados municipales y de los vecinos.

El intendente, Daniel Escalante, ha instruido al área Legal y Técnica del municipio para que proceda con la denuncia contra aquellos que perpetraron el ataque al edificio municipal.”